“BRINDO UNA VEZ MAS POR MIS AMIGOS..” (9 AÑOS DESPUÉS)

Retrocedamos en el tiempo… año 1999 (End of the century). Colegio Southern Cross, 2do año de educación media. Ese es el año en que llegan al curso don Angelo Bianchini y José Luis Peña (personajes que volverán a aparecer en esta historia). En ese entonces me llamó mucho la atención como el punk rock sonaba duro y parejo en las aulas de nuestra querida escuela. Los Ramones, Sex Pistols, Misfits, 2 Minutos, Los Miserables y Ataque 77 eran el pan de cada día, y vaya como nos marcarían por el resto de nuestros días.

Año 2000. Un viejo amigo (David Zamorano), amante de esos 3 acordes que le dan vida a la música más emotiva del mundo, llega emocionado en la mañana a clases. En su bolsillo un cassette de una banda llamada “Flema”. Por supuesto, los mismos de siempre nos sentamos alrededor de la radio y escuchamos esa sorpresita que nos traía DZ. La canción (Vahos del Ayer) comenzaba con una estrofa que jamás olvidaré: “Brindo una vez mas por mis amigos, los que solo están en mi corazón…”. Desde ese día le juramos amor eterno a esta banda liderada por Ricky Espinosa, esta banda llamada Flema.

Año 2001. Ceremonia de graduación del Southern Cross. Profesores, directores, padres, hermanos, abuelos, amigos, etc…esperaban que pronto esta generación (por decir lo menos “polémica”) se graduara luego. Pero no crean que la iban a sacar gratis. Mientras en la historia de las mil graduaciones que hay todos los años se cierra el evento con una melancólica y triste canción de despedida, nosotros teníamos una cartita bajo la manga. Termina el discurso, se cierra el telón…y a todo lo que dan los parlantes suena Flema carajo! “Vahos del ayer”… y a celebrar.

Año 2002 (30 de Mayo). Fallece Ricardo (Ricky) Espinosa. Un golpe duro para todos aquellos que aprendimos a querer a esta banda, a la simpleza de sus canciones, a la fuerza de cada una de sus melodías, y a un inspirador Ricky Espinosa que no me cabe duda brinda con nosotros desde donde sea que nos este mirando.

Años 2003, 2004, 2005, 2006. Estos son los años en que supuestamente el grupo de amigos se tiene que distanciar. El ingreso a la Universidad, las pololas, los viajes a diferentes países…motivos de sobra para separar a cualquiera. Que chucha…”Brindo una vez mas por mis amigos”. Acá nadie se distanció.

Año 2007. Cámbara, Bianchini, Peña, Watt, Carrillo, Zamorano, Silberstein y Ríos se toman un avión rumbo a Brasil. (Solo faltaron Jiménez y Steffan, por razones de fuerza mayor). En ese viaje ratificamos una vez más que este grupo trascendió en el tiempo, que independiente de las diferencias o caminos que cada uno decidiera tomar, la amistad duraría mientras los 3 acordes de una guitarra sigan entonando melodías de la calle. En este viaje además se funda La Vino Tinto, equipo que ha sabido plasmar este sentimiento inexplicable que nos une hasta el día de hoy.

Año 2008 (17 de Mayo). Me reúno a eso de las 6 de la tarde con mi compadre Peña en la plaza del barrio. Nos fumamos algunas ramas, cae una que otra cerveza y partimos rumbo al Estadio Chile. Lo que vivimos esa noche fue algo inexplicable. Flema en Chile. Les mentiría si no les digo que me acordé de cada uno de los muchachos del colegio, de todos esos momentos en que hemos brindado juntos. 9 años después del comienzo de esta historia volvió a sonar esa canción que se fue con Ricky a la tumba, pero que su banda Flema inmortalizó la noche del sábado recién pasado. “Brindo una vez mas por mis amigos”, reza este himno de nuestros días…

Con cariño,

ANGELO.

PD: “Allá afuera la misma mierda de siempre, dentro nuestro todavía esta Flema para aguantar”. (Ricardo Espinosa).